Gracias a Dios por mi salvación,
Si no fuese por ella no tendría motivo para vivir.
Gracias a Dios por los sacrificios,
Debido a ellos conozco mi nivel de fe en Dios.
Debido a ellos conozco mi nivel de fe en Dios.
Gracias a Dios por las guerras,
Porque ellas revelan a los cobardes y a los corajudos.
Porque ellas revelan a los cobardes y a los corajudos.
Gracias a Dios por los aguijones en la carne,
Si no fuese por ellos, me acomodaría en la fe.
Si no fuese por ellos, me acomodaría en la fe.
Gracias a Dios por los que me odian,
Si no fuese por ellos no encontraría fuerzas para luchar.
Si no fuese por ellos no encontraría fuerzas para luchar.
Gracias a Dios por las dificultades,
¿Cómo ejercitar la fe sin ellas?
¿Cómo ejercitar la fe sin ellas?
Gracias a Dios por los traidores,
¿Cómo reconocer a los leales sin ellos?
¿Cómo reconocer a los leales sin ellos?
Gracias a Dios por el problema nuestro de cada día,
Si no fuese por él, ¿cómo vivir en la dependencia de Dios?
Si no fuese por él, ¿cómo vivir en la dependencia de Dios?
Gracias a Dios por las injusticias,
Si no fuese por ellas, ¿cómo conocer al Justo Juez?
Si no fuese por ellas, ¿cómo conocer al Justo Juez?
Gracias a Dios por las incomprensiones,
Si no fuese por ellas, ¿cómo entender la mente humana?
Si no fuese por ellas, ¿cómo entender la mente humana?
Gracias a Dios por los dolores,
Si no fuese por ellos, ¿cómo detectar un problema físico?
Si no fuese por ellos, ¿cómo detectar un problema físico?
Gracias a Dios por las debilidades,
Porque ellas suscitan mis fuerzas.
Aprendí, en la cárcel, a hacer del limón una limonada.
Porque ellas suscitan mis fuerzas.
Aprendí, en la cárcel, a hacer del limón una limonada.
Gracias a Dios cuando estoy triste,
Porque el Espíritu Santo me alegra.
Porque el Espíritu Santo me alegra.
Gracias a Dios cuando lloro,
Porque el Espíritu Santo me consuela.
Porque el Espíritu Santo me consuela.
Gracias a Dios por la muerte,
Porque ella libera la materia para asumir la Vida eterna.
Porque ella libera la materia para asumir la Vida eterna.
Gracias a Dios por las tribulaciones,
Porque me hacen crecer en la fe.
Porque me hacen crecer en la fe.
Gracias a Dios por los disgustos de las injusticias,
Porque no permiten que mi indignación se adormezca.
Porque no permiten que mi indignación se adormezca.
Gracias a Dios por la soledad,
Porque hay más tiempo para mi Señor y Dios.
Porque hay más tiempo para mi Señor y Dios.
Gracias a Dios por mi esposa,
Porque tengo a alguien que soporta mis fallas.
Porque tengo a alguien que soporta mis fallas.
Gracias a Dios por mis hijos,
Porque tengo cómo entender a mi Padre Eterno.
Porque tengo cómo entender a mi Padre Eterno.
Gracias a Dios por los hijos en la fe,
Porque serán fieles en la continuidad del Reino de Dios.
Porque serán fieles en la continuidad del Reino de Dios.
Gracias a Dios por el trabajo de la salvación,
Porque me siento útil como siervo del Dios de Abraham.
Porque me siento útil como siervo del Dios de Abraham.
Gracias a Dios por las piedras del camino,
Porque me dan experiencia en la fe.
Porque me dan experiencia en la fe.
Gracias a Dios por haber estado en el fondo del pozo,
Sin él no habría hallado a mi Señor y Salvador.
Sin él no habría hallado a mi Señor y Salvador.
Gracias a Dios por los llamados y escogidos,
Porque ellos han hecho la diferencia.
Porque ellos han hecho la diferencia.
En fin, por todo doy gracias a Dios porque todo coopera para el bien de aquellos que aman al Señor Jesús. Romanos 8:28
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Es una maravillosa Historia y un verdadero ejemplo a seguir en cuestión de Fe, porque todo nació y partió desde ahí...
ResponderEliminarLo que hoy se conoce como la Fe Cristiana, proveniente de los tiempos antiguos, es la herencia que nos ha dejado nuestro padre Abraham.
Solo quien tiene y practica la Fe pura y Cristiana es un verdadero heredero de este gran hombre de Dios...